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Atleta con parálisis termina maratón en 36 horas

Atleta con parálisis termina maratón en 36 horas

Terminar una maratón es una gesta en sí misma, pero lograrlo luego de más de 36 horas y siendo paralítico de la cadera para abajo tiene sus méritos adicionales. Así lo hizo Simon Kindleysides el domingo pasado en la Maratón de Londres, completándola finalmente a un paso de 51:54 por kilómetro.

Todos tenemos nuestra historia de sufrimientos y alegrías, lesiones, días buenos, no tan buenos y arrastramos durante esos 42.195 kilómetros todo el peso de los sacrificios que hicimos para llegar hasta ahí y cumplir nuestra meta. Todo ese bagaje de experiencias es, en parte, lo que finalmente hace tan satisfactorio cruzar la línea de meta, algunas veces con lágrimas en los ojos y casi siempre con sangre en los pies. 

El británico Simon Kindleysides fue diagnosticado en el 2013 con un tumor cerebral y una enfermedad neurológica funcional que lo dejó paralítico de la cadera para abajo. Padre de tres niños y actualmente con 34 años de edad, Simon se propuso terminar la Maratón de Londres en su campaña para ayudar a una organización que trabaja con personas que padecen tumores cerebrales. 

Lo hizo gracias a un traje de exoesqueleto ReWalk que funciona con baterías y le mueve la rodilla y la cadera cuando detecta un cambio en el centro de gravedad de Simon, dando un paso hacia adelante. Eso y sus dos inseparables muletas con las cuales se sostuvo durante 36 horas y media. "Estoy con mucho dolor. Me ha sacado todo y no sé como me va a afectar físicamente más adelante", dijo un exhausto Simon a la prensa. Aunque contó con el apoyo logístico de los organizadores, al final Simon no recibió una medalla oficial de finalista pues terminó fuera del límite de tiempo del evento. Eso sí, recibió muchas medallas de personas que vieron su gesta y quisieron darle la de ellos. 

"Yo solo quería demostrar que cualquier cosa es posible si te lo propones", dijo Simon luego de terminar la maratón. "Puedes quedarte en cama y sentir lástima por ti mismo, o puedes salir y disfrutar de tu vida, porque solo estás aquí una vez", concluyó el británico, que ya en el 2015 había "cleteado" de Londres a París en una silla de ruedas también para recaudar fondos. Estas palabras deberíamos recordarlas todos nosotros en esos días en los que dudamos de nuestra capacidad para lograr las metas, o esos días en los que nos quejamos de todo y queremos echarnos a morir. "Puedes quedarte en cama y sentir lástima por ti mismo, o..." 

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