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Mente y correr: estados mentales para correr mejor

Mente y correr: estados mentales para correr mejor

¿Alguna vez se ha perguntado en qué debe pensar mientras corre? Tiene solo dos opciones: pensar en cualquier cosa menos en los que está haciendo (menos en correr), o concentrarse en la actividad que está ejecutando, en como se siente su cuerpo mientras corre. Escoger una u otra puede tener gran relevancia en el resultado final.

En general, se cree que los atletas de elite rinden mejor cuando su mente está concentrada en la carrera (asociación). Sin embargo, parece que a los corredores menos experimentados les va mejor cuando piensan en otra cosa (disociación). Esto está relacionado con el nivel de experiencia, con la habilidad de canalizar los pensamientos hacia factores específicos del rendimiento, y también con la capacidad de aguantar el dolor.

Cuando atletas menos experimentados comienzan a asociar, y piensan en como su cuerpo les duele mientras corren, es más probable que dejen de correr o que bajen el ritmo. En esos casos, la disociación puede ser una mejor estrategia. ¿Alguna vez ha caído en cuenta de que estaba divagando en ideas y pensamientos que nada tienen que ver con correr, y luego aterriza, y siente como si se despertara de un sueño? Si es así, estaba practicando la disociación. Su mente estaba en otro lado, quizás en algún suceso del trabajo, o pensando en el perfume que compró el otro día, o si hay leche en el refrigerador y tiene que ir a hacer compras, o en el mar, o en la luna. Exactamente, estaba en la luna. Eso es disociar. Y cuando se da cuenta quizás ya corrió varios kilómetros y “ni los sintió”. 

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Correr en lugares placenteros y con diferentes escenarios favorece la disociación. Por el contrario, correr dando vueltas en una pista o en una ruta monótona hará que sea más difícil pensar en los huevos del gallo (disculpe la expresión, pero creo que me doy a entender). 

La intensidad a la que corremos también influye directamente en lo que pensamos. Conforme aumenta la intensidad a la que corremos o cuando la fatiga se empieza a acumular, el cerebro tiende naturalmente hacia la asociación, a concentrarse en lo que estamos haciendo, especialmente cuando la corrida es tan larga o tan dura que el dolor nos invade. Por el contrario, cuando corremos a intensidades más suaves se tiende naturalmente a la disociación (a los huevos del gallo, si se quiere).

En parte por eso es que los atletas de elite tienden más a la asociación: por la intensidad tan alta a la que corren. También, ellos saben en qué pensar para su beneficio: aspectos de la técnica, se refuerzan el ánimo con palabras positivas, estrategias para vencer a sus rivales, etc. 

Pero no es necesario ser elite para beneficiarse de la asociación. Todos los corredores cambian en algún momento del entrenamiento o de la carrera entre tipos de pensamiento, a veces de forma consciente y a veces “sin querer queriendo”. Conforme gane experiencia y pruebe con cambios de ritmo, aprenderá a cambiar naturalmente entre estrategias disociativas y asociativas para su beneficio. Aprenderá también qué le conviene más en qué momento del entrenamiento y de la competición. 

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Como en todo, la habilidad se gana con la experiencia. Con el tiempo también se puede aprender a tolerar mejor el dolor y las incomodidades que surgen al correr distancias más largas o a mayores intensidades, y podrá beneficiarse con pensamientos asociativos durante la mayor parte del recorrido, tal y como lo hacen los atletas elite. 

La próxima vez que termine de correr trate de hacer un repaso rápido por sus pensamientos durante la sesión. Recuerde en qué momentos se sintió mejor, cuando sostuvo su mejor ritmo y qué estaba pensando en el momento. Ensaye también en los entrenamientos de mayor intensidad cuál estrategia le funciona mejor, y así podrá aplicar lo aprendido pronto en las carreras, para su beneficio. Ninguna estrategia es mejor que la otra, ambas pueden beneficiarnos en diferentes momentos, el truco es lograr identificar cuándo una podría ayudarnos más que la otra.

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Por: Wendy Zúñiga, Bach. Psicología UCR para abuenpaso.cr.

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